Parece mentira, pero ya ha pasado un mes desde que volvimos de Drogheda.
Después de un descanso para reponer fuerzas, empezamos a pensar en el próximo año, porqué ‘sólo’ faltan 10 meses para volver a despegar, jeje. Puesto que hemos tomado buena nota de todo aquello que creemos que podemos mejorar para la segunda edición de #KBLanguage, no queremos dejar pasar ni un día para empezar a preparar las futuras mejoras.
Lo que es seguro que no variará es el espacio en que llebamos a cabo nuestro proyecto. Porqué Drogheda es un pueblo que combina sus espacios naturales, como la ribera del rio Boyne,con la amabilidad de sus gentes, que nos ha hecho sentir como en casa.
No se nos ocurre un sitio mejor para que nuestros viajeros y viajeras aprendan inglés.